Cuando les dije a mis peques que podíamos transformar un huevo de los que teníamos en el frigorífico de forma que rebotara, su cara fue de asombro total. Según sus conocimientos hasta el momento un huevo es muy delicado y no puede dar saltitos porque se rompe.
Cuando pusimos el huevo en vinagre observamos que aparecieron pequeñas burbujas, como si fuese gaseosa. Tal y como vimos en el experimento del volcán, el vinagre es un ácido que reacciona. La cáscara de huevo está hecha en su mayor parte de calcio, que se disuelve al contacto con el vinagre, creando esas pequeñas burbujas que no son más que dióxido de carbono.
¿Por qué ha crecido?
La cáscara del huevo está separada del interior por una fina capa blanca que, al contrario de la cáscara, deja que cierta cantidad de líquido se introduzca dentro del huevo. Por esta razón el huevo «engorda».
¿Y por qué se queda como una goma?
Como todo el mundo sabe, cuando las proteínas de la clara se someten a un cambio alto de temperatura, se transforman y ésta se vuelve sólida. Con el vinagre ocurre un proceso similar, pero en vez de por la temperatura, está provocado por el ácido acético del vinagre. Podemos decir que el vinagre «solidifica» el huevo poco a poco, pero llega un momento en el que la capa sólida impide que el vinagre siga entrando, por lo que hay una parte del huevo que queda crudo.
maravilloso! lo intentaré!!
Flipando estamos con el experimento! Lo probamos esta semana para que la peque se divierta! Saludos
Estoy segura que los papis se divertirán junto al peque! Gracias por el comentario!